Edición 2016

ANUDOPI

Me siento muy honrada de presentarles nuevamente el Anuario Dominicano de Propiedad Intelectual en su tercera edición. Este esfuerzo es el resultado de la persistencia y determinación de un equipo editorial comprometido. Cada proceso de elaboración es un trayecto de gran aprendizaje que nos impulsa a seguir evolucionando con el rigor y la profesionalidad con la que hemos realizado nuestras publicaciones. Con este número renovamos la fe, las esperanzas y el entusiasmo de crear un espacio útil con el fin de responder a las necesidades y desafíos que presenta la propiedad intelectual en nuestras sociedades.

Nuestra inspiración sigue siendo cautivar a nuestros lectores, pues son los que observan los objetivos que alcanzamos, nuestro desempeño y el valor que agregamos al fortalecer nuestras raíces. Decía Winston Churchill que «para mejorar hay que cambiar, para ser perfecto hay que cambiar a menudo»; por eso estamos orgullosos de decir que ANUDOPI será́ también una publicación digital con el fin de traspasar las fronteras para seguir creciendo y madurando.

Esta edición recoge diez artículos divididos en dos secciones: Estudios y Jurisprudencia seleccionada y comentada. Tenemos el privilegio de iniciar con Delia Lipszyc, quien nos habla del dominio público «pagante», esto es, cuando existe una legislación que establece la obligación de pagar por la explotación de obras cuyo plazo de protección ha vencido. En su artículo, la profesora Lipszyc resalta la utilidad de esta institución para el nanciamiento de las industrias culturales, las artes y la preservación del folclore. Le sigue Jaime Ángeles con un artículo que examina qué se considera obra y cuándo existe una verdadera obra protegida, para la aplicación certera de las reglas de derecho de autor. Sharin Pablo trata la marca país y la necesidad de un marco legal internacional que proteja los derechos y las prerrogativas legales de una nación que pretende salvaguardar su identidad y los elementos que la distinguen del resto del mundo. Sylvio Hodos aborda un tema vanguardista: la impresión 3D y el desafío que presenta al sistema de propiedad intelectual cuando la democratización de su uso presupone impresiones sin autorización del autor. Desde Perú, Maritza Reátegui hace un análisis comparado de las distintas normas regulatorias aplicables a las muestras médicas y gratuitas. Urko Ochoa habla del uso, a su entender, desmedido que se ha dado al registro del nombre comercial en la República Dominicana como consecuencia de que su certificado se exige para diversos trámites administrativos. José Cruz Campillo relata la controversia que existe sobre la competencia de la jurisdicción civil respecto a los recursos de apelación contra actos administrativos de la ONAPI de conformidad con lo dispuesto en la Constitución dominicana. Gleirys Cruz analiza la pertinencia de un sistema de autorregulación publicitaria en la República Dominicana con el objetivo de que las infracciones marcarias sean menores. Luis Gil hace una detallada investigación que explora los factores que predicen la duración de los exámenes de patentes y las implicaciones que tienen para el debate sobre la celeridad de la oficina de patentes en la República Dominicana, donde no es correcto asumir que dicha o cina es la principal responsable de los retrasos. Finalmente, destacamos la valiosa contribución de Edwin Espinal dentro de la sección de Jurisprudencia seleccionada y comentada, que como cada año profundiza en la interpretación de una amplia selección de jurisprudencia dominicana relevante en la materia.

Queremos agradecer a nuestro Consejo Editorial, Comité Asesor y expertos por sus acertadas sugerencias y a todos los que de una manera u otra han hecho posible este número. En especial, a nuestros autores por su esfuerzo, por ser el eje central que genera la creatividad y por contribuir al desarrollo que impulsa la innovación y el progreso social.

Ana Carolina Blanco Haché
Editora

Publicado: 2016-08-01